Colombia celebra el récord del precio interno del café en medio de máximos internacionales
Colombia celebró este miércoles un récord del precio interno del café, de unos 600 dólares por saco de 125 kilos, en momentos en que la variedad arábica está en máximos históricos en los mercados internacionales.
"El café colombiano rompe récord histórico. El valor del café supera los $2.650.000 (unos 604 dólares) por carga de 125 kilos, marcando un hito en la industria cafetera", aseguró la presidencia del izquierdista Gustavo Petro en un mensaje en la red social X.
Según la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, el precio interno del saco ya se ubica este miércoles en los 2.785.000 pesos (unos 635 dólares) en el país, tercer productor mundial del grano detrás de Brasil y Vietnam.
"Este incremento impulsa el desarrollo de miles de familias cafeteras en todo el país, reflejando la calidad y el reconocimiento del café colombiano en los mercados internacionales", añadió el gobierno de Petro.
En los mercados internacionales, el precio del café arábica -mayoritario en Colombia y central a su economía- alcanzó en la jornada su máximo nivel en casi medio siglo. El movimiento se explica sobre todo por la creciente preocupación sobre la cosecha en Brasil, afectado por una grave sequía y por semanas de incendios.
La libra de arábica que se negocia en Nueva York llegó a 3,20 dólares, un valor al que no se comerciaba desde 1977. El aumento fue de casi un 70% desde inicios de año.
De acuerdo con la autoridad estadística colombiana (DANE), el café representó el 6,2% de las exportaciones totales del país en 2023 y es la principal industria detrás del crecimiento económico del 2% interanual registrado en el tercer trimestre de este año.
También conocida como arábigo, esta familia de café, que se caracteriza por producir una bebida suave, de acidez y aroma pronunciados, es la principal cultivada en Colombia, donde se siembran sus variedades Típica, Borbón, Maragogipe, Tabi, Caturra y Castillo.
Esta especie es originaria de Etiopía y se introdujo en Colombia en el siglo XVIII, para luego convertirse en uno de sus productos insignia.
M.Renzulli--LDdC